El contexto es un elemento imprescindible cuando traducimos, porque no solo se trata de llevar un texto de un
idioma a otro, sino de trasladar una idea a la cabeza de otra persona.
Por esta razón, a veces necesitamos que nos ayudes a entrar en tu cabeza para asegurarnos de transmitir tus
ideas sin distorsionarlas en absoluto.
En otras palabras, la comunicación con el cliente es crucial para garantizar el éxito de un proyecto.
¿Pero en qué momentos solemos necesitar tu apoyo?
Fase previa: ¡necesitamos conocerte para darte lo que necesitas!
Cuando te pongas en contacto con nosotros por primera vez, nuestro equipo comercial
se encargará de hacerte algunas preguntas para entender quién eres, qué necesitas y
qué te ha llevado a nuestra puerta.
Por ejemplo, si valoras mucho el uso de ciertos términos específicos de tu sector,
puedes comentárnoslo para que lo tengamos en cuenta desde el principio y valorar
la opción de crear un glosario para tus proyectos.
O también, si has colaborado con otra empresa de traducción en el pasado y estás
buscando algo diferente, nos ayudará mucho saber qué problemas has tenido o qué
buenas prácticas te gustaría mantener.
Te pediremos que nos cuentes qué haces para entender cómo podemos ayudarte a mejorar
tu negocio. ¿Buscas internacionalizar tu empresa? ¿O tal vez ya tienes filiales en
otros países y necesitas seguir traduciendo material para compartir con tus compañeros
en el extranjero?
Elaboración del presupuesto: donde se sientan las bases para que todo fluya
Cuando nos envíes uno o más archivos para traducir, nuestro equipo de Presupuestos se
pondrá manos a la obra para analizarlos y asesorarte sobre la mejor manera de gestionar
la traducción. Puede que todo esté claro desde el principio, pero habrá casos en los que
tengamos que hacerte algunas preguntas para asegurarnos de que entendemos exactamente
qué necesitas.
Nuestros gestores de presupuestos son expertos en planificar los proyectos y se encargan
de prever todos los pasos por los que el archivo tendrá que pasar para quedar perfecto en
otro idioma. Ellos se encargarán de hacerte todas las preguntas necesarias.
Ponemos en marcha el proyecto: ¿y si nos surgen dudas?
Una vez puesto en marcha el proyecto, el traductor entrará a fondo en la lectura del
texto original y buscará la mejor forma de trasladarlo a su lengua y cultura. En esta
fase del trabajo es probable que surjan dudas, que necesitemos aclarar el significado
o la intención de alguna parte del texto original, o queramos asegurarnos de que seguimos
tus preferencias a pie de letra.
Cuando esto pase, nos pondremos en contacto contigo para que nos ayudes a entenderte a la perfección.
Pero no te preocupes, nuestras gestoras de proyectos se encargarán de transmitirte estas dudas de la
forma más clara y concisa posible, para que puedas ayudarnos a resolverlas sin que pierdas tiempo.
Después de la entrega: ¿y si las dudas te surgen a ti?
En ocasiones, los proyectos no acaban cuando se entregan. Puede que, una vez recibida la traducción,
te surja alguna duda sobre el texto que has recibido. O, incluso, que se te ocurran cambios que te
gustaría aplicar por una cuestión de gusto personal. En estos casos, es muy importante que nos avises
para que tus comentarios se conviertan en una ocasión para conocerte mejor y afinar el tiro para
futuros proyectos.